Muchos de ustedes me pregunta ¿ cómo dirigir la atención dentro de la
meditación? En primer lugar, es importante todo lo relacionado con la respiración;
hay que hacerla estando bien sentados, cómodos, sin ningún tipo de ansiedad,
inhalando y exhalando por la nariz, los ojos un poco abiertos y con la disposición
para experimentar.
Si se detienen a comprender el estrés se hace patente porque no sabemos
manejar los pensamientos, en ocasiones no existen los problemas en la realidad
sino en nuestra mente, si se toman conciencia habrán apreciado, que existen
infinidad de pensamientos; por otra parte, hay que aclarar que la intención de
la meditación no involucra nada que esté relacionado con el esoterismo, ni
religión, por el contrario cualquier persona puede acceder a ella sin distinción
de posición filosófica o religiosa que tengas.
En la meditación la idea es observar el paso de los pensamientos a través de
la mente, y nada más.
¿de dónde provienen los pensamientos, y por qué lo hacen?
¿quién tiene el control de los pensamientos?
Si pensamos que tenemos el control de nuestra vida, ¿por qué no podemos
controlar los pensamientos?
¿quién es el pensador?
¿quién pone los pensamientos en la pantalla de nuestra mente?
Cuando nos encontremos en el medio de la jungla de los pensamientos, debemos
inmediatamente conectarnos con la respiración, y en el momento de la exhalación,
soltarlos, disolverlos, regresando siempre a la respiración. No se trata de
hacer una interpretación esotérica; lo importante es poder reconocer el
momento del vacío entre la inhalación y la exhalación; además, darnos cuenta
de cuánto tiempo podemos quedarnos en ese vacío, el hueco o la brecha entre
los pensamientos.
Los pensamientos son muy veloces, cambian constantemente y con mucha rapidez.
La pregunta es: ¿quién es el pensador? ¿de dónde surgen los pensamientos?
Los pensamientos son como el agua de mar en la orilla, suben y bajan. ¿se trata
de una actividad automática que no se puede controlar? ¿quién eres tú? ¿eres
o no eres tus pensamientos? ¿en qué consiste un pensamiento, cuál es la
sustancia de un pensamiento? ¿tiene acaso sustancia? Si aparece un pensamiento
que consideramos importante, ¿por qué lo es? ¿por qué aparecen también
pensamientos que a veces consideramos estúpidos? Los pensamientos también están
hechos de vacío, que toman diferentes cualidades.
Los pensamientos tienen todos la misma ?no sustancia?; no existen
pensamientos más importantes que otros .debemos domesticar nuestra mente y
pensamientos si deseamos entrar plenamente en la conciencia cósmica; los
pensamientos son como caballos salvajes desbocados, indomables, que corren
libremente hacia cualquier dirección. ¿cómo podemos domarlos? El hombre
conquista el espacio y todo lo referente al mundo físico, pero no ha abordado
la conquista de la mente que es, en realidad, la verdadera conquista
hay un principio básico para llevar a cabo nuestros deseos: el propósito de
nuestra vida ¿qué es lo que quieres? ¿qué disfrutas hacer?. El tener una
meta clara de lo que queremos es fundamental ¿cómo podríamos buscar algo sin
saber que es lo que buscamos? ¿cómo saber si ya lo encontramos?. De nada vale
tener todo el conocimiento cognitivo, todo el conocimiento 13:20, si no tomamos
el control de nuestros pensamientos, si no domesticamos nuestra mente; este es
el punto central al que debemos poner atención,
el maestro contemporáneo osho nos habla de la espiritualidad:
1.- ..de eso es de lo que trata la espiritualidad. Del vivir la muerte
intensamente, del vivir la vida con intensidad, del vivir ambos tan
apasionadamente que nada quede atrás sin ser vivido, ni incluso la muerte.
2.-la risa es la esencia misma de la religión. La seriedad nunca es religiosa,
no puede ser religiosa. La seriedad es del ego, parte de la enfermedad misma. La
risa es la ausencia de ego
Sí, hay una diferencia cuando tú ríes y cuando ríe un hombre religioso. La
diferencia es que tú siempre te ríes de otros y el hombre religioso se ríe de
sí mismo, o de toda la ridiculez humana.
La religión no puede ser sino una celebración de la vida; y la persona seria
se transforma en un inválido: crea barreras. No puede bailar, no puede cantar,
no puede celebrar.
La dimensión misma de la celebración desaparece de su vida. Se vuelve como el
desierto y si eres un desierto puedes seguir pensando y pretendiendo que eres
religioso, pero no lo eres.
Puedes ser un sectario, pero no religioso. Puedes ser un cristiano, un hindú,
un budista, un jaino, un musulmán, pero no puedes ser religioso. Crees en algo,
pero no sabes nada. Crees en teorías. Un hombre demasiado cargado de teorías
se vuelve serio. Un hombre que no tiene cargas, que no agobie su ser con teorías,
comienza a reírse. 3.-la risa relaja. Y la relajación es espiritual. La risa
te devuelve a la tierra, de hacer descender de tus estúpidas ideas sobre el
ser-más-santo-que-tú. La risa de lleva a la realidad tal y como es.
El mundo es un juego de dios, una broma cósmica. Y a menos que la comprendas
como una broma cósmica nunca serás capaz de comprender el misterio supremo.
Estoy a favor de todas las bromas, estoy a favor de la risa. Esto lo decía al
maestro osho y debemos emularlo cada día. Por eso comparto amorosa y sonreídamente
las siguientes técnicas de relajación para el malestar físico y psíquico .la
relajación está especialmente indicada en los trastornos de tipo psicosomático
y en todas aquellas alteraciones en que la ansiedad o angustia es la que provoca
los desórdenes funcionales. Como hábito psicoprofiláctico podría estar
indicada para la mayoría de la población en todas aquellas situaciones
estresantes de la vida diaria como los exámenes, el estrés laboral, las
relaciones conflictivas, etc. El objetivo fundamental de los métodos de
relajación consiste en la producción bajo control del propio sujeto de estados
de baja activación del sistema nervioso autónomo.
Estos estados de baja activación se logran como una consecuencia del
establecimiento de determinadas actitudes y actividades cognitivas. Su logro
repercutirá en un mayor autocontrol de sus conductas emocionales,
comportamentales e intelectuales. Usted no debe intentar esforzarse en lograr
directamente la relajación. Toda actitud de esfuerzo o de mantenimiento de una
expectativa de logro de relajación va a ser contraproducente ya que contribuirá
a producir un estado exactamente opuesto a lo que se pretende. La actitud básica
debe consistir en la eliminación de toda expectativa de "tener que
hacer" o "tener que lograr". Debe centrarse en las tareas que a
continuación se describen poniendo toda la atención posible en su realización
y consecuentemente tratando de evitar cualquier tipo de representación ajena a
la tarea.
Se debe confiar en que la relajación se producirá como un efecto colateral a
la realización de la tarea. Un ejercicio de relajación es mejor hacerlo en una
habitación con poco ruido y poca luz, preferiblemente en una postura de decúbito
supino (boca arriba) sobre una cama. Sin embargo, algunos de ellos pueden
hacerse sentado y en condiciones de ruido y luminosidad variables. El método de
representaciones numéricas tiene como objetivo conseguir un correcto
auto-control psicoemocional en situaciones estresantes puntuales.
Esta técnica rápida y sencilla para disminuir la ansiedad consiste en
representar mentalmente el número 10.000, preferiblemente de forma que quede
dibujado como en una pizarra en el campo de la conciencia. Se le restan dos
unidades a este número y representamos el número resultante, eso es el 9.998.
Se restan otras dos unidades y se representa el número resultante siguiente. Se
debe realizar esta actividad repetidamente durante 15 minutos, hasta que los
pensamientos negativos desaparezcan de nuestra mente.
El método del doctor herbert benson es uno de los científicos más destacados
que iniciaron el estudio de la meditación trascendental, y ha intentado
desmitificarla proporcionando las siguientes instrucciones sencillas para
conseguir la relajación:
sentarse o estirase en silencio en una postura cómoda.
Cerrar los ojos.
Relajar a fondo todos los músculos del cuerpo dejándolos "sueltos",
apoyados en la superficie donde nos encontremos, como si tuviéramos la sensación
de que esa parte nos pesara más de la cuenta.
Empezar por los pies, pensar que nos están pesando, que se apoyan libremente
sobre el sofá, cama, etc., avanzar lenta y progresivamente esta sensación de
pesadez con el resto del cuerpo: las piernas, las manos, los brazos, el abdomen
(sentir que toda la espalda se apoya relajadamente sobre la superficie donde nos
encontremos) y así hasta los músculos de la cara. Mantenerlos relajados.
Respirar por la nariz. Tomar conciencia de la respiración. Al aspirar, decirse
a sí mismo la palabra "uno", luego "dos", y así
progresivamente. Respirar con naturalidad, no profundamente.
Continuar durante diez a veinte minutos. Pueden abrirse los ojos, para comprobar
el tiempo, pero no utilizar un despertador ni un sistema de alarma. Al terminar,
permanecer sentado durante algunos minutos más, primero con los ojos cerrados y
después abiertos. No levantarse hasta que hayan pasado algunos minutos.
No preocuparse por conseguir un nivel de relajación profunda. Mantener una
actitud pasiva y dejar que la relajación se presente según su propio ritmo. Si
aparecen pensamientos perturbadores, debe intentar ignorarlos no ocupándose de
ellos y volviendo a repetir "uno". Con la práctica, la respuesta
sobrevendrá sin apenas esfuerzo. Debe practicarse esta técnica una o dos veces
al día, pero no durante las dos horas siguientes a una comida, porque los
procesos digestivos interfieren en el surgimiento de la respuesta relajante.
Método de relajación muscular: esta técnica comprende unos ejercicios muy
sencillos y precisa en total de unos veinte minutos de desarrollo. Muchas
personas la han encontrado útil para afrontar de modo específico sentimientos
de ansiedad y nerviosismo, pero también constituye una forma eficaz de
relajarse después de un día agotador. Para conseguir mejores resultados, deberá
escoger un lugar en el que pueda estar tendido. Es importante completar los
ejercicios sin quedarse dormido, aunque probablemente deseará dormir al
terminar el período de relajación. Para empezar, afloje cualquier tipo de ropa
que lo apriete y quítese los zapatos. Ahora tiéndase. A lo largo de los
ejercicios relajará progresivamente cada parte de su cuerpo, empezando por los
pies y acabando por los músculos de la cara. Para todas las partes del cuerpo
se aplican las mismas instrucciones, que son las siguientes:
cierre los ojos y ponga en tensión una parte de su cuerpo (por ejemplo los
pies). Mantenga esta tensión hasta contar 5. Mientras cuenta, procure aumentar
la tensión: 1 (fuerte), 2 (un poco más fuerte), 3 (todavía más fuerte), etc.
Hasta el máximo que pueda.
Inspire profundamente y al hacerlo libere la tensión que había cogido. Repítase:
relájate, relájate, relájate.
Concéntrese sucesivamente en cada parte de su cuerpo. En cada fase, tense y
relaje los músculos según las instrucciones:
- pies: engarfie los pies y ténselos vigorosamente, manténgase así unos
segundos. Relájelos.
- tobillos: dirija las puntas de los pies hacia su cuerpo y tense los músculos
de las pantorrillas manteniendo la tensión. Relájese.
- nalgas: empuje fuertemente las nalgas contra la silla, sofá, cama o suelo.
Relájese.
- abdomen: tense el abdomen como si esperara encajar un puñetazo en el estómago.
Relájese.
- pecho: tense los hombros apretando las palmas de las manos una contra otra.
Relájese.
- hombros: tense los hombros encogiéndolos tan altos como pueda. Relájese.
- garganta: tense la garganta hundiendo la barbilla en el pecho. Relájese.
- nuca y cabeza: presione con la nuca y la cabeza contra la parte posterior de
los hombros. Relájese.
- cara: arrugue la frente y apriete, luego relájese. Arrugue las cejas y
apriete, relájese. Cierre los ojos apretando fuertemente, relájese. Apriete
las mandíbulas y los dientes, relájese. Apriete los labios vigorosamente y
luego deje que se entreabran lentamente.
Observe en todo momento el contraste entre la tensión y la relajación. Ahora,
con los ojos todavía cerrados, experimente la energía que su cuerpo le está
proporcionando: un sentimiento de potencia y calor, tal vez incluso un leve
hormigueo.
Finalmente, vuelva a cada parte de su cuerpo, dígale sencillamente que se
relaje cinco veces. No tense los músculos. Intente conseguir una relajación más
profunda. A medida que repite la palabra "relájate", deje que su
mente se vacíe por sí misma de pensamientos. Ejercitar el cuerpo, hacer
deporte, caminar, bailar o respirar tienen claros efectos terapéuticos, y se
consideran un espléndido recurso para reducir la ansiedad, la tensión, la
agresividad y la frustración. Además, aumentan la sensación de bienestar,
mejoran el sueño y el apetito, y fomentan la concentración y la creatividad.
En sentido inverso, potenciar la mente a través de la meditación y la relajación,
mejora la salud, aumenta la longevidad y la resistencia a la enfermedad.
Recuerda además siempre el agradecimiento. Agradece todas y cada una de las
cosas que tienes en este momento, todo, lo bueno y lo malo, las personas, las
circunstancias y las cosas que nos rodean tienen un porqué, nada es casualidad
y todo está para aportarte alguna enseñanza. Agradécelo siempre. Al principio
toma el hábito de agradecer como ejercicio, esto te ayudará a centrarte en
esos detalles que ahora no percibes, en esas pequeñas cosas que te hacen feliz
pero que son imperceptibles para ti. Aprenderás a ver la vida de otra manera,
con más riqueza.
Se el arquitecto de tu maktub day (destino diario) y crea un futuro lleno de
amor en tu vida extensivo a tu familia.¡¡¡carpe diem!! Si tienes algún
comentario envíalo vía email o comunícate al 04167847663, 04148189443. O
visita la pagina: www.armoniaglobal.com ¡¡gracias por existir!!. ¡se les
quiere muchísimo! .
Elsy Mata Marcano
Centroalquimia@hotmail.com